Pasta Alfredo con créme fraîche

por | Oct 19, 2022 | Cocinar | 0 Comentarios

¿Alguna vez habéis tenido que improvisar la cena y el resultado ha sido mejor de lo que esperabáis? Eso me pasó literalmente anoche a la hora de preparar esta receta de Pasta Alfredo. Y, la verdad, estaba más rica que la que normalmente preparo.

Anoche mi plan era preparar pollo teriyaki, porque pensé que había comprado salsa teriyaki hace poco… Pero en realidad nope: en realidad había comprado salsa de ostras. Así que aproveché que tenía crema fresca (créme fraîche) de algún HelloFresh que nunca cociné y iba a expirar para preparar unos espaguetis alfredo, sin pensarlo demasiado.  

Y… ooooooooh, ¡qué delisioso! 


Normalmente preparo la Pasta Alfredo con nata, pero después de probarlo con crema fresca, creo que EEESTA sí que es la receta ideal. La felicidad y el placer que sentí al probar el primer bocado… (que mi novio, por cierto, no compartió… Pero eso es porque a veces las expresiones no le salen del cuerpo, qué le vamos a hacer)… 

cuál es la diferencia entre nata y creme fraiche

¿Cuál es la diferencia entre la nata y la créme fraîche?

En España la verdad es que nunca he visto tantos tipos de nata como veo aquí en Escocia, y sospecho que en países como Francia la cosa empeora. Mientras que en Mercadona puedes encontrar la nata líquida y la nata de montar, aquí tienes nata ligera, nata doble, créme fraîcheclotted cream y crema agria, para empezar. Que no es que no puedas encontrar estas natas en ninguna parte en España, pero son menos populares.
La diferencia principal entre la crema fresca o créme fraîche y la nata de cocinar normal se encuentra en la fermentación de la crema fresca. Mientras que la nata de cocinar normal se obtiene simplemente al separar la grasa de la leche, la créme fraîche se obtiene a partir de un proceso de fermentación con cultivo bacteriano (como se hace con el yogur, por ejemplo). Esto le da un sabor un poco agrio pero también una consistencia densa, mucho más jugosa que la de la nata.

Ingredientes para Pasta Alfredo

  • 1 cebolla mediana
  • 1 pechuga de pollo
  • 150 ml de créme fraîche
  • 90 g de pasta por persona (yo usé espagueti)

Calorías: aprox. 158 kcal/100 g. (fuente)

  • Parmesano
  • Sal y pimienta
  • Aceite de oliva

Tiempo de preparación: 30 minutos.

Cómo preparar Pasta Alfredo

1. En una tabla, pela y corta la cebolla por la mitad. Luego córtala en rodajas.

2. En una sartén de mediano tamaño, pon una cucharada de aceite de oliva y calienta a fuego medio. Una vez el aceite esté caliente, sofríe la cebolla.

3. Mientras la cebolla se sofríe, limpia la pechuga de pollo. Córtala en dados de mediano a pequeño tamaño. 

4. Añade el pollo a la cebolla, removiendo para cocinar bien el pollo. (IMPORTANTE: lávate las manos y los utensilios con los que hayas preparado el pollo antes de hacer nada más. El pollo crudo contiene bacterias que pueden provocar enfermedades como la salmonela, así que ¡ten cuidado!).

5. Cuando el pollo esté doradito por todos sus lados, añade la crema fresca a la sartén y deja cocinar por unos dos o tres minutos. ¡Aprovecha para salpimentar!

6. Mientras tanto, si tienes un hervidor de agua (una maravilla de invención humana, la verdad), pon algo de agua a hervir para cocer la pasta. 

pasta alfredo - receta - cebolla

1. Pela y corta la cebolla en rodajas. Sofríe en una sartén con una cucharada de aceite.

2. Corta el pollo en dados.

pasta alfredo - receta - pollo

3. Añade el pollo a la cebolla y sofríe hasta que quede doradito.

7. Añade la pasta a la sartén (Sííí, ¡no la cuezas -ni enriquezcas- antes!). Si son espaguetis, (como en mi caso) se saldrán un poco, pero conforme se vayan cocinando puedes doblarlos hacia dentro sin problema. 

8. Añade medio vaso de tu agua hervida a la sartén para cocinar la pasta (si no tienes hervidor, pues… tendrás que usar un cazo para no bajar la temperatura de la salsa) durante diez minutos. Si empieza a quedarse demasiado seca, añade más agua (pero tampoco te pases porque se te puede quedar aguada y eso es un asco…).

9. Una vez la pasta esté cocinada y la salsa densa (haya perdido toda el agua y haya adquirido el almidón de la pasta), añade parmesano. En recetas normales te dirán que unos 30 g, pero tú y yo sabemos que medir el queso no tiene sentido porque cuanto más mejor. Así que, ¡echa cuanto quieras! (Pero recuerda que las calorías variarán si le echas más queso, así que si estás intentando cuidarte, contrólate un poquito 🤭). Aprovecha también para probar la salsa y salpimentar si hiciera falta.

pasta alfredo - receta - cebolla

4. Ahora es el momento de cocinar tu crema fresca durante dos o tres minutos, con el pollo y la cebolla.

5. Añade la pasta directamente a la sartén, sin cocer ni enriquecer.

pasta alfredo - receta - pollo

6. ¡Tu cena debería estar lista en unos diez minutos! Dale el toque final con un poco (o un mucho) de parmesano, sal y pimienta. 

Et voilà! Ya puedes abalanzarte sobre tu plato de Pasta Alfredo.

¿Qué te ha parecido la receta? Como ves, es un plato súper sencillo y muy rico, que se hace en una media hora (cuando eres lenta como yo – ¡seguro que se puede ir más rápido!). Además, al preparar la pasta en la misma sartén en la que se cocina la salsa, ensucias menos platos, y eso es algo que tu futuro yo siempre va a agradecer 🧡

¿Cómo preparas tú la Pasta Alfredo? ¿Conoces algún truco que la haga más rica? ¿O puede que quizás hayas inventado la versión vegana de este plato? ¡Cuéntame en los comentarios de abajo!